Marzo fue, es y será por siempre el "mes del regreso a clases". Y que puede ser más representativo de este tópico que uno de los programas top de la nostalgia televisiva: Señorita Maestra. Si bien hubo una primera versión en blanco y negro (en 1966), donde la docente era Evangelina Salazar y la malvada (Etelvina) María Valenzuela, la más recordada por las generaciones ochentas es la que se emitió por ATC entre 1982 y 1985, con Cristina Lemercier. Ella era Jacinta Pichimahuida, la señorita maestra más copada que todos soñaban tener. Tan querida era por sus alumnos, que cada vez que terminaban las clases se las ingeniaban para volver a tenerla el año siguiente (y de esa forma asegurarse también la continuidad del programa). Abel Santa Cruz fue el creador de esos personajes (Palmiro Caballasca, Cirilo Tamayo, Etelvina Baldasarre, Meche, Canuto, Siracusa, Strabuco) cuyos nombres resuenan -a veces involuntariamente- en la memoria colectiva. Muchas de las obsesiones del autor, como la discriminación racial y/o socioeconómica, eran los ejes de los conflictos que, generalmente, se centraban en el vínculo (o la falta de) entre Etelvina (rica, rubia e insoportable) y Cirilo (pobre, negro, pero honrado). Un verdadero signo de los tiempos es la bandera argentina con la inscripción "Las malvinas son Argentinas", detrás del escritorio de la maestra.
En el elenco se destacaban también Jorge Barreiro (el padre de Etelvina), Rey Charol (el padre de Cirilo), Patricia Castell (como la Sra. Directora) y muy especialmente Héctor Fernandez Rubio como el portero Efraín, ese que llamaba a los alumnos "blancash palomitash".
Una década después Telefe estrenaba la versión mexicana de este éxito, con el nombre de Carrusel. Los mismos personajes, la misma historia y el mismo éxito que se repitió en todo el mundo. En este video puede comprobarse de que manera la prosa de Santa Cruz manejaba los temas de conflicto: dos compañeritos de Cirilo intentaban venderle una crema para que "pueda dejar de ser negro". Lo más tremendo era que Cirilo estaba interesado en comprarla.
El suceso de este formato no se detuvo en esta nueva versión: continuó luego con Carrusel de las Américas (1992). En nuevo milenio tuvo también su adaptación: ¡Vivan los niños!, también mexicana, de 2002, que logró reunir al casting a los peores actores infantiles en años.
Más de Señorita Maestra en La Tele del Recuerdo.
miércoles, 27 de febrero de 2008
La TV nos educa y entretiene
sábado, 23 de febrero de 2008
El amor esta en el aire (en el avión, más precisamente)
Luego de bofetear con ganas a Luisa Kuliok en Amo y señor, la carrera de Arnaldo André tuvo un despegue... hacia los aeropuertos. Primero en El infiel, luego en Amándote I y II. Su papel de piloto aéreo nunca debió enfrentar conflictos gremiales, vuelos demorados ni cancelaciones: lo único que podía retrasar un vuelo era un affair con alguna señorita. Con Ginno Reni como eterno compañero de aventuras, podríamos decir que tenían un amor en cada aeropuerto. En Amándote (1988) se enamoró de Jeannette Rodríguez y en Amándote II (1990) de Carolina López, otra actriz venezolana. Todos amores muy conflicitivos, dado que al protagonista le gustaban demasiado las mujeres. Casi tanto como al editor de esta promo, en donde Patricia Sarán y sus amigas ocupan más espacio que el propio protagonista.
miércoles, 20 de febrero de 2008
Amor en silencio
Después de ser el galán -durante varios años- de Andrea del Boca, Gustavo Bermúdez protagonizó la telenovela Nano, junto a Araceli González. La ex modelo devenida en actriz aprendió el lenguaje de señas y dejó mudos a todos sus detractores en su -podríamos decir- primer y último éxito importante en la pantalla, en donde luego encabezó tiras como Sheik, El último verano, Primicias y Provócame, todas fracasos estrepitosos. Sin palabras.
martes, 19 de febrero de 2008
El show de los divorciados
Lo que no se daba en la realidad, quisieron que pasara en la ficción. Catherine Fulop y Fernando Carrillo se llevaban como perros y gatos y la idea fue juntarlos "otra vez" para protagonizar Cara Bonita. La química fue explosiva, pero en el sentido contrario al deseado. Por más que trataran de vender pasión, se notaba que no podían ni verse. La telenovela tuvo su final feliz y el matrimonio de Fulop y Carrillo tuvo... su final.
lunes, 18 de febrero de 2008
El rostro del amor
Diva indiscutida de las telenovelas, Verónica Castro conquistó las pantallas argentinas desde principios de los 80 con títulos como Los ricos también lloran, El derecho de nacer y Rosa salvaje, entre otras. Sus productos funcionaron tan bien que realizó varias producciones en nuestro país, donde además se la vinculó sentimentalmente con cuanto galán trabajó. Muchas de sus novelas se repitieron varias veces hasta muy avanzados los 90 y en este video la vemos a Verónica (seguramente en una de sus tantas visitas "estéticas" a nuestro país), haciendo una promo para Canal 9, anunciando el comienzo de El rostro del amor, la telenovela que iba en reemplazo de Rosa Salvaje.
domingo, 17 de febrero de 2008
Atrévase a casar
Continuando con este especial de febrero dedicado al amor en la pantalla, llega el turno de uno de esos ciclos que paso tan desapercibido que seguro pocos recuerdan. En el año 93, América 2 seguía buscando su rumbo y decidió convocar a Berugo Carámbula para realizar una suerte de mix entre Atrévase a soñar y Yo me quiero casar y ud. El resultado de esta unión fue bautizado con el original título de Amor a primera vista y se emitía de lunes a viernes a las 18. Los participantes eran de un target bastante más joven que los del ciclo de Galán, pero lo premios (electrodomésticos Ultracomb, set de maquillage) eran muy similares a los del anterior ciclo de Berugo en Canal 9, ese donde los sueños se hacían realidad.
Si bien la credibilidad de los participantes de estos ciclos estuvo siempre bajo la lupa, en este caso podemos ver que uno de ellos es el actor Pablo Patlis, que unos años después participaría de varios programas de Canal 9 como Mujercitas, Ricos y famosos y Sin Condena, entre otros.
jueves, 14 de febrero de 2008
El último autor
En uno de sus últimos manotazos de ahogado para recuperar el rating perdido, Romay llamó a Migré y le dijo "Albertito, te pongo toda la mosca que haga falta para que hagamos un éxito inolvidable como fue aquel Rolando Rivas". El autor de Una voz en el teléfono no pudo resistirse ante el nuevo encargo del Zar, un teleteatro semanal, en horario nocturno y con un protagonista prestigioso: Miguel Angel Solá. El programa se terminó llamando Leandro Leiva, un soñador (siempre fue cábala que el nombre y el apellido empiecen con la misma letra) y comenzó a emitirse los martes a las 22.00 en el año 95.
A Migré le gustaba mucho el contacto directo con los televidentes y era habitual que apareciera antes del primer capítulo o una vez finalizado el último haciendo comentarios y reflexiones sobre lo que había ocurrido.
En este video, transmitido el día antes del estreno de Leando Leiva, no podía disimular su entusiasmo ante la nueva producción. Como padre de la criuatura y muy emocionado, describía los entretelones de la grabación e invitaba a toda la audiencia a sumarse a este nuevo producto, que fue un fracaso tan rotundo que provocó la pelea final entre Romay y Migré.
Cosecha de exportación
La extraña dama fue una novela funcionó muy bien internacionalmente. Sobre todo en Italia, que sucumbió bajo los enigmas de La donna del misterio. Con gran parte del equipo responsable de esa producción y el aporte del magnate italiano Silvio Berlusconi, en 1991 se estrenó Cosecharás tu siembra, nuevamente con Kuliok, y esta vez junto a Osvaldo Laport, en su primer protagónico. El elenco también contaba con actores de renombre como Lautaro Murúa y Virginia Lago. Ah, y Edda Bustamante. La historia que rodeaba a sus protagonistas (Giuliana y Luca) transcurría en la Sicilia de los años 30 e incluía al poder y la mafia. Se emitió por Canal 9 a las 18.00 y ganó el premio Martin Fierro a la Mejor Telenovela.
domingo, 10 de febrero de 2008
V de Venganza
Varios años antes de calzarse los hábitos para ser La extraña dama, Luisa Kuliok vestía una modestísima túnica franciscana para su personaje Némesis Paiva, un nombre-vaticinio que le marcaría su destino (al igual que la diosa griega de la venganza) en la telenovela Venganza de mujer, de 1986, que se emitía por Canal 9 en el horario de las 16. La filosa pluma de Delia González Márquez se atrevía entonces a una historia en la que una joven ¿correntina? era violada por cuatro hombres cuando sólo tenía 17 años (si, es así, en la primera parte de la historia Kuliok componía a un personaje de 17 años, una verdadera licencia poética), para años más tarde regresar como toda una dama y vengarse de los abusadores. Al igual que en Piel naranja, esta telenovela mesopotámica acuñó varios términos guaraníes, como "Añá" (demonio), palabra con la que llamaba Némesis a Juan Ignacio (Raúl Taibo).
En esta tira participaron muchos rostros clásicos de los 80 como Mariana Karr, Cristina Tejedor, Elizabeth Killian y Margarita Ros, entre otros. Mención aparte merece el tema musical a cargo de Amanda Miguel, versión libérrima de Memories, del musical de Broadway Cats.
viernes, 8 de febrero de 2008
La novela sor presa
Como se comentó en una entrada anterior, el año 89 fue uno de los más críticos en la historia de la TV argentina: crisis energética, con los horarios de transmisión recortados; crisis económica, con una hiperinflación impresionante y hasta con la posibilidad que que los canales 11 y 13 se cerraran. Dentro de este contexto el productor Omar Romay (hijo del Zar y dueño en ese entonces de Canal 9) se embarca en un proyecto tan ambicioso como riesgoso: realizar una telenovela con un standard de calidad superior al que se venía haciendo hasta ese entonces. El resultado de este proyecto fue La extraña dama, un éxito arrasador que alcanzó la categoría de clásico, como una de esas telenovelas que "todo el mundo recuerda". Luisa Kuliok era una atormentada mujer que termina en un convento, con el fantasma de un amor y una hija que creía perdida, y acosada dentro de esas paredes por una perversa aspirante a Madre Superiora, Sor Paulina (María Rosa Gallo). La historia fue un suceso absoluto y abrió el camino a otras realizaciones de alto presupuesto como Cosecharás tu siembra y Más allá del horizonte.
martes, 5 de febrero de 2008
Hay que casarse más

El formato televisivo ahora conocido como Date Show, tuvo su indiscutido representante local en Roberto Galán. Un personaje ya convertido en mito de la TV argentina, arrancó en los 60 con Yo me quiero casar... y ud? por Teleonce, regresando en 1989 por Teledos y un par de años después por Canal 9, donde realizó varias temporadas. En este programa, tres hombres y tres mujeres eran entrevistados por el animador y en el último bloque cada uno emitía un voto. En el caso de haber coincidencia, llegaba el momento de la inolvidable frase "Se ha/n forrrrrrrmado una/dos/tres pareja/s". Luego, la cosa continuaba fuera del programa con una cena y un par de salidas. Si todo seguía viento en popa, la cosa podía llegar al altar, también organizado por la producción.
El momento más famoso (y polémico en aquel entonces) ocurrió cuando Galán casó a una pareja de enanos. Algo bastante pequeño (¡cuack!) si lo comparamos con otro gran mito que rodeó siempre a la figura de este celestino: el haber sido responsable del primer encuentro entre Juan Domingo Perón y Eva Duarte.
Dueño de un tiempo y una oratoria impensados en la TV de hoy en día, Roberto Galán era un perfecto interlocutor que lograba momentos formidables conversando con sus participantes sobre los más diversos temas universales, que podían ir desde cómo sobreponerse a la pérdida de un ser querido, hasta la receta perfecta de una pasta frola.
Para terminar, y como regalo especial en el mes de los enamorados, la letra del tema de apertura del programa, cuya autoría es del mismísimo Roberto.
Nací para ti, aquí me tienes
Que te hace feliz, dime que quieres
Te esperé, en soledad tanto tiempo
que me estás dando la vida si sientes tú
lo que yo siento.
Juntos los dos, es como un sueño
donde el amor encendió
nuestra luna gris.
viernes, 1 de febrero de 2008
Te rompo el rating
En enero de 1988 (hace exactamente 20 años) Canal 9 publicaba, orgullosamente y a página completa, que de los 30 programas más vistos ese mes, 22 pertenecían a su pantalla.
Entre los más vistos se encontraban la telenovela Cristal, Seis para triunfar y Nuevediario. Del resto de los canales sólo asomaban en el podio el Fútbol de Verano por TeleDos, La noche del Domingo (y la del Sábado), con Gerardo Sofovich, por Canal 13 y la telenovela mexicana Cuna de Lobos (el programa más visto de Canal 11). ATC no figuraba con ningún ciclo.
Las empresas responsables de las mediciones en ese entonces eran IPSA y Mercados y Tendencias. IBOPE todavía no existía.
