domingo, 20 de septiembre de 2015

Buscando testigos de ritos perdidos


Desde la secuencia inicial, en donde una voz en off va enumerando los títulos de la época de oro de Lavalle, con imágenes donde las salas fueron reemplazadas por Farmacitys o iglesias varias, se puede intuir que nos vamos a enfrentar a un relato melancólico mezclado con algo de humor e ironía.
Un importante preestreno es exactamente lo que vende su copete: una historia oral e improbable de la cinefilia porteña. Una suma de testimonios (Fernando Martín Peña, Axel Kuschevatzky, Fabio Manes, representantes de las distribuidoras, los responsables del Cine Club Núcleo, Cristian Sema -Raro VHS- y hasta la reaparición de Dardo Ferrari) reconstruyen la historia de los porteños y el cine, en un recorrido que abarca distintos períodos. Primero, la década del 60, en donde el cine-arte estaba en boga; seguido por el golpe de Onganía, la censura, la primavera camporista, el Proceso y el destape Alfonsinista. 
Además del recorrido histórico, se repasa la forma en que la tecnología fue cambiando hábitos. Resulta emocionante ver la lucha por acceder a material audiovisual en la era previa al video, en donde la alternativa al cine y a la televisión se reducía a los proyectores Súper 8 -que permitían ver únicamente fragmentos de películas- o las escapadas hacia las salas de Uruguay para acceder a lo que la censura prohibía en Argentina. 
Los momentos más bizarros llegan con las anécdotas de exploitations varias surgidas durante el regreso de la democracia en 1983, donde siete años de censura abrieron las puertas a grandes películas nunca estrenadas y a pícaros distribuidores que convertían cualquier bodrio que tuviera alguna escena de desnudos en un posible éxito de taquilla, como ocurrió con la mítica Déjala morir adentro, tal vez la máxima representante de ese maravilloso período.
La edición presenta ideas muy ingeniosas, como los juegos con textos de los avisos de diario, pero por otro lado hay momentos en que resulta incómoda la forma en que se cortan ciertos relatos de los protagonistas.    
Un importante preestreno es una cita imperdible para quienes vivieron o para los que quieran descubrir otra historia del cine argentino, una suerte de backstage de boleterías, con anécdotas increíbles sobre la industria local.


Aprovechen para verla los viernes y sábados de septiembre en el Centro Cultural San Martín.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Donde puedo conseguir una copia en DVD de este documental ?

Claudin dijo...

La misma pregunta....

Boogie_El_Aceitoso dijo...

Pasó mas de un año desde este post... Hace un tiempo puede ver por el CINE AR el documental. Ciertamente está muy bueno, se me piantó un lagrimón... Sobre mediados de los 80s me mude a la ciudad de Bs. As, donde viví durante mucho tiempo y tuve la posibilidad de asistir a los últimos estertores de la calle Lavalle. Cita obligada de los Sabados, caminar la calle pasar delante de la parrilla "La Estancia" viendo su clásico asado al asador, o a la Cruz, y pensar en voz alta "algún día voy a poder entrar a comer aquí..." Mi economía de entonces no permitía ese lujo y lo loco es que nunca fuí!! Pasaron los años, de a poco, sutilmente fueron cambiado los hábitos de consumo, las nuevas tecnologías, Vhs, fueron dando lugar a otras alternativas del entretenimiento. Todo esto refleja de alguna manera el documental, entre otras cosas. Así, de a poco cuando nos quisimos dar cuenta Lavalle no era más la calle de los Cines... Esa cita obligada de Sabado a la noche, previa caminata por Corrientes viendo librerias... Así también, fue pasando la vida, de a poco, sutilmente también. Se va nublando de a poco ese tiempo. Hoy, orillando los 56 años y desde el interior de la Provincia de Bs. As, cierro los ojos y recuerdo esa epoca con la emoción y también con la deformación, la ambiguedad que la melancolía despierta en forma inexorable. Saludos. Resiste, literalmente Resiste la decadencia de los Blogs hoy devenidos también testigos de otra epoca.