Gracias al usuario Lezica pudimos acceder a estos espectaculares archivos de Canal 11, emitidos el martes 28 de febrero de 1989, que nos permiten reconstruir el escenario que se vivía en ese particular año.
La tele argentina -y el país- atravesaban una crisis terrible, tanto económica como energética. En aquel verano del '89 las emisiones se habían restringido (ver este post) y particularmente el Canal 11 estaba casi quebrado. Aquí podemos ver algunos promogramas de esos días:
Hollywood en Castellano. Casi como una continuación de la estrategia utilizada por los cines en el regreso de la democracia, en donde se estrenaban películas ignotas cuyo atractivo excluyente eran los desnudos (se pueden recordar casos como el de Déjala morir adentro, cuyo título original era Julie Darling), Canal 11 hacía lo propio en el terreno de la televisión. Acá promocionaba mediante escenas fuertes el thriller Trampas (Fake-Out, 1982) como si se tratara de un drama carcelario del estilo Cadenas calientes, repitiendo ¡dos veces! en el mismo avance las escenas de las duchas (probablemente las únicas con desnudos que tenía esa producción), al son ¡adulto! ¡inquietante! ¡audaz!, el típico estilo de ventas de ese canal.
Amo y señor. Un claro síntoma de la pobreza reinante: con una programación reducida entre las 18 y 2 hs. el canal anunciaba con bombos y platillos la repetición de Amo y señor, telenovela del año 1984. Claro que la excusa era contundente: después del arrasador éxito de Amándote, continuar con otra tira de Arnaldo André.
Martillo Hammer. La serie con el título más capicúa de la historia de la televisión argentina, un superclásico de Canal 11, vendía el estreno de este sublime episodio de Sledge Hammer en el que se parodiaba ni más ni menos que a Vértigo de Alfred Hitchcock.
Hola Gente. El verano terminaba y el clásico de Mateyko reunía a las estrellas de la temporada: Emilio Disi y Dorys del Valle, Sandro, Susana Giménez, Jairo, Valeria Lynch, Sergio Denis, Estela Raval, Carlos Andrés Calvo, Luis Landriscina, Guillermo Francella, Pimpinela y Zulma Faiad entre otros.
Comienzo de clases
Como no podía ser de otra manera, la tanda de fin de febrero estaba plagada de ventas escolares. Cuadernos, guardapolvos y mochilas invadían las tandas y nos torturaban recordando que faltaban pocos días para el comienzo de clases:
La computación es el futuro
También sorprendía en estas tandas la proliferación de escuelas para estudiar "computación", es decir basic, wordstar, entre otras vanguardias del momento.
Las elecciones del 89
Faltaban sólo dos meses y medio para que se llevaran a cabo las elecciones presidenciales y los dos principales candidatos ya tenían presencia en las pautas publicitarias. Angeloz prometiendo un "Cambio sin caos"; Menem vendiendo ¡un libro! -seguramente basado en sus lecturas de Sócrates- con entrevistas junto los máximos referentes de la economía mundial. Habría que salir ya a buscar algún ejemplar de este incunable en Parque Rivadavia, que no debe tener desperdicio.
La guerra de los vinos blancos
Una histórica batalla de aquel momento: los vinos Facundo y Crespi desafíandose entre sí sobre cuál era la manera más honesta de vender este brebaje.
Sprite vs. 7 Up
Dos gaseosas competidoras intentando ganarse al público joven, con una brújula estética ya orientada hacia los EE.UU.
¿Gancia Batido o Yogur Batido?
Podías elegir entre el glamour de uno o el costumbrismo del otro.
La lotería de Las Primas
La hiperinflación asomaba y tal vez la única forma de salvarse era comprar un billetito de La Chaqueña, con el grupo Las Primas (¡devuelvan al Topo!) cantando ¡Sacátela!
¿Vamos al cine?
El estreno de esa semana era Salsa, película musiquera clase Z, heredera del reciente suceso de Dirty Dancing. En este caso, protagonizada por el ex Menudo y futuro autor de temas como Livin' la vida loca, Robby Rosa.
Antes o a la salida del cine, se podía ir a Mc Donald's en busca de un Big Mac:
En fin, después de esta pausa comercial de 1989, podemos continuar con nuestras vidas de 2012.
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