Hola Arturo

En diciembre del 94 Susana Giménez debió ser internada de emergencia en la clínica Fleni a raíz de un derrame cerebral. El diagnóstico, por suerte, fue sumamente optimista: el daño se había causado en una "zona muerta" de ese órgano. (Sí, acá viene la parte donde se podrían hacer setecientosmil chistes al respecto, pero vamos a esquivar la obviedad).
Durante cuatro días, el pánico y la incertidumbre colmaron todos los medios. Pero finalmente la diva telefónica fue dada de alta y regresó a Su casa.
Obviamente no pudo reincorporarse a Su programa y quien tomó el mando fue el padre del rating de ese momento: Arturo Piug.



Grande, Pa atendió los teléfonos, hizo los sorteos y entrevistó a los invitados. Y como no podía ser de otra manera, tuvo la exclusiva de la primera comunicación telefónica. Al grito de ¡Hola, Susana! conversó con la dueña del programa a pocos minutos de su alta médica. Luego del relato de todo lo acontecido, el progenitor de las chancles alzó la copa al grito de un nunca más pertinente ¡Salud!.